sábado, marzo 25, 2006

TEORIA DE LO RELATIVO

Cuando veas un gigante, examina antes la
posici?n del sol; no vaya a ser la sombra de un pigmeo.

Friederich L. Freiherr von Hardenberg




Fue ella la que me hizo recaer en lo que llamo la ��teor?a de lo relativo��.

Cualquier ecuaci?n cambia su resultado dependiendo, ?nica y exclusivamente, de un solo factor: el otro
As? entonces, mismos escenarios son cielo o infierno, mar o desierto, noche o d?a, dependiendo si estas con esa persona o no.
Reacciones diferentes ante mismos efectos, resultan si es un ser querido u otro los que coaccionan en ?se efecto.
Uno dice que lo enoja (digamos a modo de ejemplo) que le molesta que le dirijan la palabra al despertarse, pero si quien comete la infracci?n es una persona (para nosotros) especial, uno no se altera.
Uno puede perdonar ciertas cosas, porque se da cuenta que la persona en cuesti?n es demasiado especial como para pelarse por una prenda colgada de la canilla de la ducha.
Uno puede detestar hacer ��colas��, pero uno si se trata de esperar a un amigo para que retire la entrada de un recital uno lo hace, sin fastidiarse.
No nos jode que opriman el pomo de la pasta dental por la mitad, nos jode que ��tal�� persona lo haga,
No te altera el ruidito de pochochos en el cine, porque si es tu hijo te lo bancas.
As? con todo.

Resumiendo, no son las ��acciones�� en si lo que a uno le molesta, sino quienes ejecutan tales actos. Todos nuestros estados de ?nimos y nuestras emociones, entonces, pasan a ser relativas, todo depende, ?nica y exclusivamente, de quien tengamos enfrente.